Aunque no lo parezca, la tarta de hoy es una tarta de queso y la peculiaridad que tiene, a parte de que la he decorado, es que esta vez he sustituído el típico queso crema Philadelphia por queso fresco Quark. Los resultados han sido tan buenos que no podía dejar de publicar la receta de la tarta de queso Quark y compartirla con vosotras.
Una de las razones por las que me gustan tanto las tartas de queso es porque son muy versátiles ya que se pueden hacer con una gran variedad de quesos. El más común es el queso de untar tipo Philadelphia, pero a mi me gustan más otros quesos más cremosos y con más sabor como el Mascarpone, la Ricotta o el queso fresco, el requesón o el Quark.
Este tipo de queso es muy común en países como Alemania y hace un tiempo era difícil de encontrarlo aquí. Por suerte, ahora lo venden en casi todos los supermercados y lo podréis encontrar en diferentes formatos y versiones: como queso batido 0% o como queso cremoso para untar ( éste sólo lo he visto en Lidl). De cualquier forma está buenísimo y es especialmente recomendable para desayunar mezclado con unos copos de avena o con un poco de fruta.
Aunque yo os propongo una forma mucho mejor de degustarlo: como tarta de queso Quark!
Otro de los motivos por los que soy fan de la tarta de queso es porque es uno de los pocos postres que se pueden hacer light, utilizando la versión 0% o ligera del tipo de queso que escojáis y usando siempre leche desnatada. Ya sé que no tendrá el mismo sabor... pero al menos servirá para no tener tantos remordimientos luego!
En esta ocasión y por mucho que haya usado queso Quark light, al cubrirla con nata y trufa y decorarla con bombones... no creo que haya conseguido hacerla nada ligera! Ups!
Y por último, las tartas de queso también se pueden decorar, como cualquier otra tarta y presentarlas de forma bonita y elegante. No os aconsejo usar coberturas muy empalagosas como la buttercream, pero sí cubrirlas con alguna crema ligera y esponjosa.
Si estáis conmigo y os gustan las tartas de queso tanto como a mi, no dudéis en preparar esta... os encantará y os hará quedar como la reina de las tartas allá donde la llevéis! Disfrutarla!
Tarta de queso Quark Para 1 molde redondo de vidrio Pyrex de 24cms. Ingredientes:
Preparación:La noche o día anterior... Precalentar el horno a 180º y prepara una fuente o bandeja de horno honda para el baño maría. Poner a calentar un cazo con un poco de agua caliente y cuando hierva, bajar el fuego y colocar encima del cazo un bol resistente al calor con el queso fresco tipo Quark, las semillas de la vaina de vainilla, la mantequilla y la leche. Remover hasta que el queso se haya derretido e integrado en la mezcla. Apagar el fuego y dejar templar. Mientras se enfría, usar el mismo cazo y calentar más agua. Cuando hierva, verterla en la fuente o bandeja de horno que teníais preparada y meter al horno. Repetir el proceso hasta que la fuente esté casi llena de agua. Montar las claras a punto de nieve junto con un chorrito de zumo de limón. Cuando empiecen a espumar, añadir el creemos tártaro y continuar montando. Una vez empiecen a estar firmes, añadir, sin dejar de batir, el azúcar en forma de lluvia y continuar batiendo unos 5 minutos más. Tienen que quedar unas claras muy firmes y blancas. Reservar. Añadir al bol de queso Quark y leche, las yemas de huevo, la harina y la Maizena. Remover bien hasta que esté todo integrado. Por último, añadir a la mezcla las claras montadas incorporándolas poco a poco y con movimientos envolventes para que no se bajen. Verter la masa en un molde de vidrio forrado con papel vegetal ( para desmoldar fácilmente). Bajar la temperatura del horno a 150º y hornear la tarta de queso al baño maría durante unos 40-50 minutos aproximadamente. Transcurridos los primeros 30 minutos, comprobar cocción y ajustar el tiempo restante en función de cómo esté de horneada la tarta. Una vez veáis que está lista, apagar el horno y dejar enfriar en el horno con la puerta abierta. Una vez templada, retirar del horno con cuidado, tapar con papel film o de aluminio y enfriar en la nevera. Dejar reposar toda la noche o unas 6 horas. La cobertura ( opcional)Ingredientes:
Preparación:Montar la nata. Cuando veáis que empieza a montar añadir el azúcar glas y la vainilla. Montarla hasta que quede firme. Vigilarla ya que si la montáis demasiado, pasará a hacerse mantequilla y no servirá. Es difícil de explicar cuál es el momento justo para dejar de batir. Yo suelo guiarme por el color; cuando empieza a amarillear paro. Usar la nata blanca para forrar e igualar toda la tarta. Ayudaros de una espátula pequeña para aplicar la nata sobre la tarta y alisarla. Si queréis ver un tutorial de cómo se cubre una tarta podéis visitar la esta entrada. Una vez la tarta esté alisada y blanca, dejar reposar en la nevera unos 30 minutos para que coja un poco de frío y quede un poco más firme. Con la nata sobrante prepararemos la capa de trufa. Para ello, añadir las 3 cucharadas de cacao a la nata y mezclar con una espátula con movimientos envolventes. Reservar en la nevera hasta que la tarta haya reposado. Pasado el tiempo, cubrir la parte superior de la tarta con la trufa. Alisar con la espátula como os muestro en este tutorial de cómo se decora una tarta y con los sobrantes que se acumulan en los bordes, iremos aplicando la trufa a los lados de la tarta creando el efecto bicolor. Alisar con la espátula y refrigerar de nuevo. Decorar con lo que queráis: algunas filigranas de trufa o de nata, bombones como lo que usé yo, fruta, conguitos... pensad en algo divertido! Mantener la tarta en la nevera hasta la hora de servir. |
Notas:
- Para evitar que la tarta se agriete, es aconsejable dejarla enfriar en el horno, dejando éste apagado y con la puerta entreabierta.
- Cuantas más horas repose en la nevera mejor, quedará más firme y estable.
- Si no os gusta hornear al baño maría, también se puede hacer de la forma habitual pero tendréis que tener en cuenta que la tarta no quedará tan cremosa y esponjosa, pero buena igual!
- Para el baño maría es recomendable usar moldes de vidrio pero si no tenéis, usar un molde desmontable bien protegido con papel de aluminio para que no entre agua ni se oxide.
- Si queréis usar bombones como yo para decorar, ponerlos al final, justo antes de presentar ya que se ablandan con el frío de la nevera.
- Para cortar y que los trozos de tarta no queden manchados de trufa, usar un cuchillo largo y plano mojado en agua caliente y secado después. Así se desprenderá la tarta sin problemas.
- La tarta se conserva en la nevera de 4-6 días.
- Si no tenéis ni idea de cómo se decora una tarta, aquí encontraréis un tutorial paso a paso de cómo se hace.
- Encontraréis más recetas de tartas de queso en este enlace.
Pero que tarta tan rica! Vaya pinta que tiene! A mi también me encantan las tartas de queso pero con el quark no la he probado, pero solo con verla se me hace la boca agua! Un saludo.
ResponderEliminarHolaaaa esta receta me ha gustado muuucho. Yo uso mucho ese queso y voy a probar tu tarta aunque la voy a modificar un pelìn. Ya te cuento ehh.
ResponderEliminarUna cosa. Creo que falta las medidas de la leche, harina y maizena.
Besoteeeeee.
Tiene tan buena pinta que si pudiera metía la mano y me llevaba un trozo!
ResponderEliminarGracias por la receta.
Saludos!
Uso muito desse queijo do lidl além do bom preço éótimo
ResponderEliminarA tarte ficou linda ...linda
bj
a mi también me encantan las tartas de queso pero nunca he probado de queso quark. Un beso
ResponderEliminarAquí me has dado... al ser fan incondicional de las tartas de queso, al ver esta me ha dado algo! jaja, no exagero. Te ha quedado maravillosa, fantástica, cómo me gusta ese tono de chocolate que va en degradado. Por supuesto que se pueden decorar, como bien dices y además es muy versátil, pero tengo que decirte que a ti te ha quedado genial.
ResponderEliminarCon tu permiso me llevo la receta :)
Besotes
Esto no es una tarta de queso quark... esto es una tentación pecaminosa de queso quark... qué pintaza!!!
ResponderEliminarbesos