Ayer, mientras buscaba recetas de Cupcakes en Internet, me topé con la receta de un
snack que me tiene totalmente cautivada y que no pruebo desde hace años...los
Pretzels!!!
La primera vez que los probé creo que fue en el Reino Unido. Yo tenía 18 años y estaba trabajando durante el verano en un parque de atracciones en Windsor, Legoland, para aprender inglés y poder mantenerme mientras estaba allí. Ese fue mi primer contacto con la restauración, si un Fast-Food se puede incluir en esta categoría! El verano siguiente los volví a ver en USA, otro verano trabajando y estudiando, y allí es cuando me empecé a enganchar. Recién hechos, calentitos, mmm... estaban deliciosos! Pero no fue hasta que me fui a vivir a Alemania que me enganché!
En Alemania a cada dos pasos te encuentras con una Bäkerei (panadería) y es literalmente imposible no caer en la tentación. El Pretzel o Bretzel es un snack típico alemán. Cualquier ocasión es buena para tomar un Bretzel; en el desayuno o en la merienda (con mantequilla por dentro o con queso fundido por encima), como acompañamiento en las comidas o como acompañamiento a la cerveza (hay que comer algo para poder absorber esas jarras de cerveza!). Aunque creo que en Baviera son mucho más populares que en el resto del país (al menos, esta es la impresión que me dio a mi!).
Existen dos versiones de Bretzels o Pretzels: duros o blandos. Los duros son los que seguro identificaréis muchos de
vosotr@s porque son exactamente iguales a los palitos salados que se comen como aperitivo o
snack. Los blandos son los más típicos alemanes y los que me gustan a mi!
En Barcelona es difícil encontralos. A veces los he visto en alguna panadería alemana, pero no suelen ser unos habituales ya que no deben tener mucha salida. Lástima!
Y todo esto para deciros que no he podido resistir la tentación, o la nostalgia, y me he puesto manos a la obra!!! He preparado Bretzels!! Síiiiii!!! Aquí unas imágenes que ilustran el gran momento!
Sí, ya sé que la forma no me ha quedado muy parecida al Bretzel, pero es la primera vez!!! De hecho, de 4, sólo este se parece un poco a lo que debería ser! El resto, podemos decir, que son bollitos de pan de Bretzel! Ups! He dudado hasta de poner la foto pero estoy tan emocionada que me he dicho...de perdidos al río!
Sin embargo, de sabor están buenísimos y la textura sí es muy parecida a los que yo recordaba!
Bretzels o Pretzels
Ingredientes:
Para la masa:
- 240gr de harina de todo uso
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de azúcar (algunas recetas ponen azúcar moreno)
- 2 cucharaditas y 1/4 de levadura (yo he puesto de panadería, 1 sobre entero)
- 237ml de agua caliente (no hirviendo). En invierno mejor poner un poquito menos, unos 200ml.
Para el "topping":
120ml de agua caliente
2 cucharadas de bicarbonado sódico
3 cucharadas de mantequilla derretida
Sal para espolvorear (sal kosher si tenéis, sino...sal gorda!).
Preparación:
Mezclar todos los ingredientes en un bowl y amasar bien, durante unos 5 minutos. Hasta que la masa quede suave y se pueda despegar bien de las manos. Hacer una bola y meter en una bolsa de plástico. Dejar reposar 30 minutos.
Pasado el tiempo, dividir la masa en 4 bolitas pequeñas y dejarlas reposar sobre una superficie enharinada o engrasada, para que no se peguen. Dejarlas durante 5 minutos, sin cubrir.
Mientras tanto, en otro bowl, poner el agua caliente del "topping" y el bicarbonato. Remover bien hasta que el bicarbonato esté disuelto.
Pasados los 5 minutos, coger la primera bola y amasar haciendo una especie de "cordón" que luego tendréis que enlazar haciendo la forma del Bretzel. Como me explico muy mal y una imagen vale más que mil palabras, os dejo un
link de un
video para que veáis exactamente como se da forma al Bretzel.
Sumergir cada Bretzel en el agua con bicarbonato y dejar en la placa del horno (del revés, como dice el video) reposando unos 10 minutos más.
Meter al horno, precalentado a 250º, durante unos 8-10 minutos o hasta que estén dorados. Al sacarlos del horno, pintar cada Bretzel con la mantequilla, hasta que os quedéis sin.
Y listos para comer! Calientes es cuando están más buenos.
Importante:
* Al amasar hacerlos bien largos y siguiendo el grosor que dicen en el video.
* Cuando los enlacéis, cogerlos y separarlos bien para que no se peguen. Al meterlos en el horno ellos suben y si no los habéis separado bien, como me pasó a mi, se juntan y el resultado final parece un bollo y no un Bretzel!!
Aguantan un par de días, bien tapados, aunque siempre es mejor que antes de comerlos los calentéis en la tostadora/horno.
Os recomiendo que los partáis por la mitad y los untéis con mantequilla! buenísimos!! Con queso deshecho por encima también están de muerte!!
Espero que os gusten! Yo, al menos, ya he matado el gusanillo aunque prefiero volver a Alemania y degustar uno insitu!